Dolor detras de la rodilla en reposo

El día de hoy les acercamos una charla de ingreso abierto sobre «Actualización en el Diagnóstico y Régimen de la Infección Protésica Articular: La Relevancia del Trabajo Multidisciplinario».

Va a tener sitio en el Salón de Actos del Hospital Clínico Universitario de Santiago de Compostela este viernes 25 de noviembre de 09:00 a 16:00 horas.

Mal tras la rodilla. Causas

Hay una extensa variedad de probables causas del mal posterior de rodilla: tendinopatías, desgarros, desgarros musculares, etcétera., si bien las lesiones tendinosas son las lesiones más habituales, según el Centro Nacional de Salud estadounidense.

– Sobrecarga del poplíteo: el poplíteo es un pequeño músculo con apariencia de triángulo, responsable de comenzar la flexión y sostener la seguridad de la rodilla. Ocupaciones como correr o ponerse en cuclillas tienen la posibilidad de sobrecargar el poplíteo, ocasionando que pierda flexibilidad y también inflamación del tendón (tendinopatía).

¿De qué manera lidiar con la distensión o tirón del poplíteo?

Primeramente para nuestra búsqueda diagnóstica no hay que poner resonancia o ecografía, puesto que un óptimo examen (realizado por manos de especialistas, no «manos enormes» que podría ser mucho más grave para agregar a esta clínica comprometida imagen del deportista) debe, por orden del canon, seguir la lesión. seguramente dibujemos el popliteus, producido últimamente. Una vez reconocido la llegada y extensión del daño muscular, se aplica hielo, puesto que la actitud inicial dada esta lesión es sensato con crioterapia o frío, contención o vendaje terapéutico servible (tap) y reposo deportivo con elevación del pie. , hasta la visión. como tenemos la posibilidad de. Es cierto que si nos encontramos en la carretera o en el campo de competición o entrenamiento, nuestra actuación va a ir antecedida de un despacio estiramiento terapéutico para eludir la total retirada muscular.

A lo largo de los próximos tres días cambiaremos el vendaje y vamos a hacer sesiones de hielo de veinte minutos a lo largo del día y vamos a aplicar un aerosol o gel antiinflamatorio en la región dolorida. A los cinco días se tienen la posibilidad de efectuar rápidos masajes de contorno articular en todas y cada una de las rodillas, prestando particular atención al hueco poplíteo, o la región posterior. Entonces frotar los nudillos y amasar con un despacio bombeo linfático, por el hecho de que la región es rica en vasos. El mayor inconveniente de las técnicas manuales en esta región es la enorme riqueza de linfáticos. Por ende, las técnicas tienen que hacerse con bastante precaución. Otras técnicas como el “masaje profundo” o el masaje Cyriax profundo se efectúan desde el quinto día de la lesión. Tienen una finalidad desfibrosante, si bien su aptitud en los primeros días de regeneración semeja reorientar las fibras musculares, favoreciendo una adecuada cicatrización y eludiendo la fibrosis prematura. Es precisa una prolongación terapéutica, desde la primera semana, y tras la app de frío vaporizado para llenar estas sesiones de terapia. Desde la perspectiva de la Medicina de la Mano, este régimen debe completarse con la normalización articular de tibia y peroné. Puede ser una rotación excesiva de la tibia, externa o interna, o puede ser una tibia previo o posterior excesiva (asimismo hay que revisar su situación en el tobillo). Pero, de la misma forma, la lesión puede empeorar por la situación enclenque del peroné, en el maléolo o en la cabeza del hueso de afuera de esta rodilla.

Lesión de menisco

Los meniscos son cartílagos con forma de letra C encargados de amortiguar el espacio entre la tibia, la rótula y el fémur. Los movimientos inesperados, en especial laterales o de torsión, tienen la posibilidad de romper o desgarrar estos tejidos.

Según la región de la lesión se genera mal. Se puede producir tras las rodillas, a los lados, adelante y al caminar, subir y bajar escaleras.

¿Por qué razón se crea el mal en la cara interna de la rodilla?

El mal en la parte interna de la rodilla en ocasiones es provocado por debilidad muscular, en tanto que esto altera el movimiento habitual de la rodilla. Por ende, se producirá una mayor carga a la que van a estar sometidas las rodillas por la parte interior, en vez de repartirse uniformemente. Transcurrido un tiempo, este incremento de carga y presión ocasionará daño y mal dentro de la rodilla.

Los más frecuentes son: