Carta a un hijo que se casa
Elena Arroyo es especialista en desarrollo personal y profesional y reconexión sensible. En su libro “Sé el cambio que deseas ver en tus hijos”, charla de de qué forma ser padre es una enorme compromiso y lleva a cabo un procedimiento que tiene tres pilares básicos: autoconocimiento, avance personal y manejo capaz de las conmuevas. .
La autora incluye una carta personal que escribió este verano a su hijo mayor, a lo largo de unos días en los que estaban separados. El día de hoy desea comunicar con nosotros esta hermosa carta:
20 Oraciones de madre a hijo para poner en una carta
- Da igual el tiempo que pase, siempre y en todo momento vas a ser un niño .
- El cariño de una madre es imposible cotejar con ningún otro género de amor.
- No hay ninguna persona mejor que una madre que te entiende, te protege, te disculpa y te quiere.
- Da igual cuantas cosas te sucedan en la vida y cuantos cambios se muestren en tu sendero, mi amor por ti jamás acabará, hijo mío.
- Una madre solo precisa que sus hijos tengan fuerzas para proseguir adelante.
- En el momento en que te transformas en madre, por el momento no andas en el centro de tu cosmos. Ese trabajo en este momento es de tus hijos.
- Desgraciadamente, no puedo prometerte que voy a estar contigo tu vida, hijo, pero puedo prometerte que te amaré por el resto de mi vida.
- Sé que no soy la madre especial, pero asimismo sé que te amo mucho más que a mi vida.
- El peor mal que he sentido es verte padecer, hijo mío.
- Si bien solo llevas 9 meses en mi vientre, nunca van a poder arrancarte de mi corazón.
- En lo que se refiere a mí, mi mayor tesoro eras tú, hijo mío.
- Ningún idioma puede expresar cuánto te amo, hijo.
- Eres la mejor razón que tengo para ser feliz y fuerte.
- Fuiste la novedad que cambió mi vida para toda la vida.
- Todo padecimiento y temor desaparecen con tu sonrisa.
- El chaval que me robó el corazón me llama.
- Mis hijos son lo mucho más bello que tengo y lo que me llena de alegría.
- No hay éxito relacionado con ver reír a mis hijos.
- Claro, el cariño es ciego: Comencé a quererte antes de conocerte, hijo mío.
- Tras tenerte sé que en la vida hay amor.
Una carta de una madre a un hijo es una enorme ocasión para aproximarte a tu hijo a fin de que no se sienta incómodo o vulnerable. Al redactar tu carta, trata de eludir culparlo o culparlo por algo que haya hecho, pero utiliza este espacio para probarle que andas de su lado y que comprendes con lo que pasa. Para hacer una carta mucho más emotiva, puedes integrar ciertos ejemplos de tu niñez que encajen con las ocasiones por las que atraviesa tu hijo.