En las fiestas y celebraciones no faltan las asambleas entre familiares y amigos, y la comida como fundamento de alegría y celebración. El deseo, el exitación y el desenfreno brotan de manera fuerte en el hogar y en la mesa. De eso se habla la celebración: de ir alén de las limitaciones sociales impuestas a nuestros cuerpos y frecuentemente pasa que ingerimos y tomamos bastante, pero entonces nuestra salud pasa factura. Ya que si nos pasamos de la raya, resulta conveniente tomar medidas para no enfermar, por poner un ejemplo, comer alimentos depurativos que sean de temporada y mejor crudos: naranja, limón, manzana, calabaza, alcachofa, remolacha, toneladas de ajo y cebollas, coles de todo género…
En los trastornos alimenticios rutinarios es prioritario proteger bien, eminentemente, de nuestro aparato digestivo, tal como tener en consideración la nutrición que practicamos en la vida que tener ¿Qué tenemos la posibilidad de realizar con las afecciones digestibles más frecuentes? Indudablemente, poner antídoto próximamente pues son muy desapacibles, y esto nos puede contribuir a comer los remedios caseros para toda la vida con apariencia de alimentos, infusiones o decocciones.
Síntomas de indigestión o indigestión.
Son bastante distintas, pero simples de detectar.
Náuseas.
Vómitos.
Diarrea.
Dolor estomacal.
Vergüenza en el momento en que piensas en comida.
Acidez.
Flatulencia.
Lenguaje seco y refulgente.
Fatiga.
Cefalea.
Malestar general.
Sudoración.
Soda natural o agua de jengibre
Una bebida a partir de agua mineral, jengibre y limón puede ser realmente útil en el momento en que se tiene dolor estomacal. El agua ha de ser siempre y en todo momento tibia o ardiente, en tanto que si se bebe fría puede acrecentar los espasmos y las afecciones.
Como integra este estudio, el agua con jengibre rallado se encuentra dentro de los antídotos mucho más poderosos para las náuseas, los vómitos y el mal abdominal. Esta mezcla tiene dentro un antioxidante que inhibe la producción de radicales libres, asiste para achicar la inflamación y anula los ácidos estomacales.
Leche de arroz
Optimización la digestión, resguarda la mucosa del estómago y combate la diarrea. Hervir 1/2 taza de arroz en 1 litro y medio de agua a lo largo de 15 minutos, dejar enfriar y colar.
El agua de arroz de horchata se encuentra dentro de las bebidas mucho más habituales de México y se acompaña mejor con la comida en el momento de comer.
Preparación
Primero, vuelca el jengibre fresco en una cazuela con agua y déjalo hervir a lo largo de 5 minutos. Sacar del fuego, dejar descansar y colar.
Entonces añade el jugo de limón y la miel.
Al final, tómalo 2 o tres ocasiones cada día.
El té de manzanilla es otro buen antídoto para batallar este mal. Más que nada tras una comida bastante abundante.
