Otro antídoto realmente bueno y rapidísimo para calmar el mal de muelas en el hogar es masticar perejil fresco en la región donde sentimos el mal (eso sí, hay que masticar delicadamente). Esto le va a ayudar a calmarse, merced a las características anestésicas del perejil. Tal como achicar la carga bacteriana que contamos en esa región.
Esencial: tras masticar el perejil, enjuágate bien la boca a fin de que desaparezcan todos y cada uno de los restos y no quede nada entre los dientes.
El ajo, entre los remedios caseros para calmar el mal de muelas
Pertence a los alimentos con mucho más usos populares durante los años. En este sentido, sus características antibióticas y antiinflamatorias serían aprovechadas para mitigar el mal de muelas.
Sin embargo, tienes que llevar cuidado y preguntar su empleo; puesto que se han encontrado peligros socios a esta práctica. Un caso clínico anunciado por la gaceta Primary Dental recopila una quemadura producida en la persona que advierte del peligro asociado a continuar este procedimiento. Por este motivo, no es recomendable continuar este antídoto para tal fin.
Utilizar un resfriado
El resfriado contribuye a desinflamar y es buen anestésico. Es conveniente si tienes hinchazón en la cara o en las encías, probablemente te asista con el cefalea asociado a lo que pasa en tu boca.
Lo destacado es utilizar una bolsa de hielo o una compresa fría en la región, que puede calmar el mal y limitar la hinchazón.
Tanto si estos remedios naturales son efectivos tal y como si no, es primordial que tras aplicarlos limpies bien la boca
Si tu mal es de origen contagioso, va a tener una persistencia natural. Un apósito puede llegar a complicarlo. Hemos leído casos de pacientes que asistían al dentista con infecciones graves tras llevar mucho más de una semana entre los apósitos mucho más sugeridos de la red. Puedes probarlo con…
Pasta de ajo, entera, desmenuzada o remojada en aceite de oliva
Pasta de clavo, polvo de clavo o aceite de clavo mezclado con aceite de almendras.
Cebolla entera, desmenuzada o marinada en aceite de oliva
Mezcla media cucharada de sal marina con un vaso de agua no muy caliente y úsalo de esta manera que lo haces con el enjuague para la boca.
Este es un antídoto tradicional para calmar un mal de muelas de forma rápida y puede ser realmente efectivo. El frío marcha como un anestésico casero. De ahí que, en el momento en que se aplica frío en la región perjudicada, los vasos sanguíneos se contraen y vas a sentir alivio, con lo que el mal de muelas va a ser mucho más llevadero.
