La ley del hielo en la pareja

La ley del hielo se refiere a la sensación de irritación que aparece en el momento en que 2 personas que no se conocen procuran interaccionar. Esta irritación frecuentemente se traduce en falta de comunicación o comunicación superficial. La ley del hielo puede aparecer en cualquier contexto donde haya interacción popular, por poner un ejemplo, en una asamblea de trabajo, en una celebración o aun en una cita. Si bien la ley del hielo puede ser incómoda, tiende a ser temporal y se puede sobrepasar con algo de esfuerzo.

Si bien la ley del hielo puede ser incómoda, tiende a ser temporal y se puede sobrepasar con algo de esfuerzo. Si te hallas en una situación donde sientes que la ley del hielo está en pleno efecto, aquí existen algunas cosas que puedes llevar a cabo para superarla:

Efectos negativos de la ley del hielo en la pareja

Ahora, vamos a comentar ciertas secuelas que genera la ley del hielo en las relaciones:

1. Los cimientos de la relación se destrozan a golpe de indiferencia, incomunicación y sangre.

Tomar conciencia del daño

Es esencial rememorar que en ocasiones quien escoge el silencio no es siendo consciente de la toxicidad y las secuelas negativas de su actitud para la otra persona.

La Sra. enseña. Rivas que «esta clase de personalidad desmesurada se fundamenta siempre y en todo momento en un trastorno de personalidad narcisista: siempre y en todo momento desea tener el control. Una amenaza directa a su frágil y también inmaculada integridad».

¿De qué manera puedo comprender si me hacen la Ley del Hielo?

Frecuentemente asociamos el abuso o castigo con insultos, chillidos, golpes, amenazas o tonos violentos, pero no posee por qué razón ser de esta forma: la otra persona siente que no existe, eso asimismo.

Gracias a que no hay un ataque directo, no se observa la gravedad de esta manipulación, sino es un accionar pasivo-belicoso que se disfraza o disfraza.

En el momento en que la ley del hielo es una manera de manipulación

Hablamos de un inconveniente a mayor escala. En un caso así, entre los asociados de la ley emplea deliberadamente el hielo como una manera de manejar al otro. Por el momento no es una contestación sensible, sino más bien una acción facultativa planeada. Esto puede ocurrir pues la persona ha aprendido, en la relación de hoy o en una relación previo, que puede conseguir refuerzos bien interesantes de la ley del hielo, como la atención de la otra persona.

Es esencial admitir en el momento en que esto pasa pues la persona que emplea la ley del hielo recurrirá a ella en el momento en que lo crea favorable y la utilizará para manejar a la otra persona, dejando sentimientos de culpa y también insatisfacción. Es peligrosísimo pues esta estrategia insidiosa puede accionar de forma esconde: la víctima no se percata de que es manipulada, cede a los deseos de su pareja e inclusive puede perjudicar las relaciones a posteriori.