Hasta la actualidad se pensaba que los pequeños pateaban en el momento en que escuchaban voces, música, etcétera., pero no en todos los casos es de esta manera. Lo cierto es que aun los estudiosos no pudieron saber cuál es su aptitud auditiva en el útero.
Varias personas aseguran que el ámbito está insonorizado hasta por 4 meses y que comienzan a conocer sonidos por medio de la vagina a las 16 semanas. Otros comentan que prestan atención a determinados sonidos y aprenden expresiones por medio de la reiteración, aun formando recuerdos que se activan al escucharlos de nuevo. Por este motivo, los médicos aconsejan la estimulación, para mejorar el desempeño neuronal y por consiguiente prosperar la educación.
Síntomas en la madre en la semana 31 de embarazo
En la semana 31 de embarazo la mujer puede estar preocupada por el hecho de que nota algunas contracciones y puede dudar que contracciones son de parto.
Mucho más generalmente, son contracciones de Braxton Hicks. Estas contracciones endurecen el abdomen y tienen la posibilidad de ser incómodas, pero no duelen. Además de esto, se distinguen de las contracciones del parto pues son irregulares y no incrementan en intensidad ni en continuidad.
Otros estímulos tienen la posibilidad de desplazar al feto
El ginecólogo obstetra Guillermo Obando asegura que un descenso en los escenarios de azúcar puede lograr que el bebé se mueva menos. Comunmente, la nutrición de la madre está socia al movimiento habitual del bebé en el útero. Pero en el momento en que incrementa la proporción de glucosa en la sangre de la madre, el feto asimismo experimentará este incremento.
En este sentido asimismo intervienen otras caracteristicas; por poner un ejemplo, asimismo se conoce que los alimentos fríos impulsan una mayor actividad. Además de esto, nuestra actividad de la madre influye en mayor o menor medida en el movimiento del niño. De ahí que, a veces es conveniente despertar al niño estimulando la comida.
Recuento de movimientos fetales
El control de salud del bebé se llama ‘recuento de movimientos fetales’, que se frecuenta efectuar tras la semana 28 para comprender que el bebé está sano y se desplaza frecuentemente.
Radica en contar las ocasiones y frecuencias que el bebé se desplaza en el útero a lo largo del día, contando en situación apacible, de costado, y repitiendo a exactamente la misma hora todos y cada uno de los días.
En el momento en que comiences a apreciarlo, tu vínculo madre-hijo se estrechará aún mucho más. Si aún no andas segura, puedes preguntar a tu médico o comadre cualquier ocasión. En la mayor parte de las situaciones, es suficiente con un veloz vistazo a la ecografía o medir los latidos del corazón del bebé para comprender que todo está bien y vais a estar todos mucho más relajados. Quizás fue un día muy ocupado y la madre se encontraba tan ocupada que no se percató del niño. Entonces ella y su pareja se preocupan si algo anda mal.
