Juegos de enseñar a caminar a bebes
Caminar necesita un equilibrio entre la coordinación, la posición y la fuerza física; además de esto, el niño debe poder transladar su peso a cada lado y hacia adelante. Los próximos son los signos de que un niño puede estar listo para caminar: el niño puede sentarse y usted tiene la posibilidad de tirar de él de manera sin dependencia, mientras que se mantiene de un elemento fijo para respaldarse.
Actividad: Tu equilibrio
Dale al niño un elemento grande como una pelota y ayúdalo a caminar con él. En el momento en que los pequeños cargan algo que se considera bastante grande para ellos, su centro de gravedad se ajusta y deben adoptar una posición corporal diferente a en el momento en que andan sin cargar nada. Realizando este ejercicio asistirás a tu hijo a sostener la estabilidad mientras que anda, progresando su movilidad gruesa.
Por qué razón los especialistas aconsejan juegos estimulantes para instruir a un niño a caminar
Por el hecho de que todo desarrollo de desarrollo precisa un refuerzo ocasionalmente, si deseas que tu hijo aprenda a caminar con sencillez y velocidad, es esencial animarlo desde temprano por medio de juegos. Eso sí, sabiendo los tiempos y sin forzar el desarrollo, lo acertado es animarlo con cosas como chapotear en el agua o tumbarlo boca abajo a fin de que midan la fuerza en las piernas y la aptitud para llevarlo a cabo. girar por sí solo.
Para educar a tu hijo a ofrecer sus primeros pasos, hay un sinfín de ocupaciones estimulantes para encender esa curiosidad de independencia y a fin de que logre despegarse de los brazos y comenzar a recorrer lo profundo de sus pies. .
Ayúdalo con una almohada
A fin de que le resulte simple y cómodo adoptar la situación de gateo, con las rodillas y las palmas de las manos en el suelo, colocale una almohada bajo el cuerpo. Esto le dejará no acostarse boca abajo.
Explota para animarlo poniéndole a 4 patas, esto es, ¡su altura! Exagera un tanto los movimientos, de este modo te va a llamar mucho más la atención y te divertirás observando tu ejemplo.
Primer ejercicio
Levanta tu cabeza ante ti. Déjalo ir bien en el suelo y sostén sus manos. Entonces, empieza una cuenta: uno, 2; uno, 2 al tiempo que tú, con la punta de tus pies, empujas delicadamente todos sus piececitos hacia adelante. Recuerda: el número uno siempre y en todo momento va a venir con el acompañamiento del pie derecho y el número 2 con el acompañamiento del pie izquierdo. Prosiga en todo momento que su hijo desee.
Es lógico que no sepa lo que significa tu recuento, o lo que hace de todos modos. Pero los fonemas le asistirán a asociarlos con el movimiento y el hecho de caminar por casa va a ser una experiencia bien interesante que deseará regresar a llevar a cabo próximamente.