Comencemos por el principio: para comprender por qué razón es viable el fluído tras la ovulación si hay un embarazo, lo que puede semejarnos extraño al comienzo.
Tras el embarazo, ciertas mujeres experimentan lo que los expertos llaman leucorrea fisiológica del embarazo. No se alarme por el nombre, es solo el nombre que se le da al incremento habitual del fluído vaginal, que hace aparición como un fluído turbio, lechoso y también inodoro.
La causa más frecuente de los síntomas
La causa más frecuente de mal de ovario es el mal pélvico intermenstrual. Es un mal en el abdomen (bajo vientre) situado en un lado que corresponde al óvulo que está ovulando. En un caso así hay que tomar en consideración que ciertas mujeres ovulan todos y cada uno de los meses de un ovario alterno y otras ovulan múltiples meses del mismo. Por consiguiente, la sensación de mal se puede advertir cada mes en diversos puntos.
En todo caso, acostumbra perdurar desde unos minutos hasta 48 horas. El mal es punzante, calambres. Además de esto, puede irradiarse al eje inferior.
Relación entre ovulación y embarazo
Si eres siendo consciente de los síntomas de la ovulación, es requisito prestarle una atención excesiva y desviarla de los temas rutinarios de la vida, lo que deja, habitualmente , preocupación que estropea bastante la calidad de vida de la mujer y su pareja.
La otra situación muy habitual es la contraria: despreocuparse y aguardar varios años para poder el embarazo esperado, sin preguntar a un profesional.
Tengo fluído vaginal, ¿debo preocuparme?
Primeramente, el fluído vaginal es habitual y puede mudar de textura (mucho más como una rigidez de clara de huevo o mucho más líquida, por servirnos de un ejemplo), tal como de color. Predominantemente ha de ser transparente, blanco o blanquecino, y es esencial estar atento a probables cambios.
Además de esto, es primordial tener en consideración que cada mujer es única, de la misma su embarazo y por consiguiente no hay verdades absolutas. O sea para otorgar pautas en general que lo asistirán a entender mejor todo cuanto experimenta.
Tapón mucoso
Como afirmábamos, en los primeros días de embarazo el fluído vaginal consigue una textura mucho más espesa y densa, puesto que transcurrido un tiempo se transformará en el tapón mucoso. Esta secreción empezará en la apertura del cuello uterino hasta el momento en que esté absolutamente sellado.
La función del tapón mucoso es aislar al bebé del exterior, protegiéndolo de gérmenes que subsisten o tienen la posibilidad de colonizar el GIT. Esta composición es echada en el final del embarazo, en el desarrollo de parto, singularmente en el momento en que el cuello uterino empieza a dilatarse.
