Un helioma plantar, generalmente popular como «uña», es una hipercacia localizada que perjudica a la cubierta mucho más profunda de la epidermis a consecuencia de la presión ejercida sobre la piel por un punto óseo o por un agente de afuera en exactamente la misma dirección y al reves.
En ocasiones, gracias a un cambio en la cubierta basal y las crestas epidérmicas, el helio resurgirá transcurrido el tiempo más allá de que se suprima la presión aplicada a la epidermis.
Causas del heloma plantar
Hay distintas causas para la aparición de callosidades. A dios gracias, el más habitual puede prevenirlo usted mismo. Usando un zapato conveniente, poco recio y amoldado al pie, evitaremos afecciones superfluas en la planta.
No obstante, el helio plantar asimismo puede manifestarse por exostosis o cambios biomecánicos al caminar. En un caso así, ha de ser cauto y llamar a expertos calificados para evaluarlos.
General
Los helomas son una afección recurrente de la piel, con frecuencia llamadas «callos», que perjudica a ciertas unas partes del pie, provocando fuertes dolores a la compresión directa y al caminar, e inclusive son causa de contrariedad. en el momento en que se emplea cierto zapato. Ese mal se crea por la capacitación de hiperqueratosis local, o sea, por la acumulación de queratina en un punto de la cubierta superficial de la piel.
Estas lesiones afectan con una mayor frecuencia a la región del antepié, pero tienen la posibilidad de suceder en cualquier región del pie, desde el talón hasta los dedos. Hay muchos géneros de helomas según su apariencia y la región del pie donde se muestran, siendo los más frecuentes los helomas plantares, interdigitales y dorsales.
Elementos
½ taza de vinagre de sidra de manzana (125 ml).
2 medidas de cuchara de aceite de ricino (20 ml).
2 litros de agua ardiente.
1 piedra de provincia.
2 medidas de cuchara de jabón líquido neutro (20 ml).
Primero, coloca el jabón líquido en 2 lts. de agua ardiente y viértelo en un envase.
Ahora, añade el vinagre de sidra de manzana y remoja tus pies a lo largo de unos 15 minutos.
Pasado este tiempo, lijar las superficies duras con piedra pómez y remover el exceso de piel fallecida.
Ahora, seca con una toalla despacio y acaba fregando las ubicaciones perjudicadas con aceite de ricino.
Reiterar el régimen a lo largo de diez días.
– “OJO DE GALLO”, “OJO DE POLLO” O HELOMA INTERDIGITAL
En un caso así, la fricción y la presión se generan fregando los huesos de los dedos. Esta lesión con frecuencia se encuentra entre el cuarto y el quinto dedo.
