Hay múltiples técnicas para efectuar un aborto seguramente son correctas según la duración del embarazo. En términos en general tenemos la posibilidad de nombrar 2 géneros de métodos: uno a través de la utilización de fármacos y otro las llamadas técnicas quirúrgicas. En el presente artículo nos referiremos a entre los métodos quirúrgicos: Aborto por aspiración.
Es requisito aclarar que la razón por la que este procedimiento se clasifica en la categoría de métodos quirúrgicos, si bien no es una cirugía propiamente esa, es por el hecho de que necesita la utilización de instrumentos que ingresan al útero y por tal razón. , necesita de personal apropiadamente preparado para llevarlo a cabo.
Duración del embarazo al aborto
Aborto por cirugía. El tiempo máximo de embarazo sugerido para someterse a este procedimiento no debe sobrepasar las 12-14 semanas, por su mayor sencillez y inferiores peligros. Asimismo podría hacerse a lo largo del embarazo de sobra de 14 semanas, pero se precisaría mucho más cirugía para estrechar un tanto mucho más el cuello uterino. Con esto, no incrementa el peligro, pero sí la duración del trámite.
Aborto farmacológico. Para escoger este procedimiento de aborto, la duración del embarazo no ha de ser mayor a 7 semanas, y antes de efectuar cualquier trámite, la mujer debe someterse a una ecografía para saber el estado del feto y en consecuencia, entender las opciones de efectuar este trámite. . Hay que preguntar a un experto para saber si la mujer tiene alguna patología que logre perjudicar la salud de la mujer, relacionada con los resultados consecutivos de los fármacos abortivos.
¿Para qué exactamente sirve?
El raspado se puede efectuar para los próximos objetivos:
Evacuación del contenido del útero: como restos de ovario, formaciones anómalos o aun un feto retenido tras un aborto espontáneo. Asimismo está correcto en el puerperio, en el momento en que queda tejido placentario. La meta es remover estos elementos para impedir el avance de infecciones.
Recolección de muestras de tejido uterino: en el momento en que se sospecha cáncer de útero o hay sangrado uterino anormal, el ginecólogo puede señalar raspado para juntar y estudiar muestras de tejido endometrial.
Como régimen de nosologías uterinas: por servirnos de un ejemplo, miomas, pólipos, ciertas irregularidades menstruales o inconvenientes relacionados con gadgets intrauterinos (DIU), entre otros muchos.
