La primera cosa que vamos a hacer para elaborar nuestro pelo de ángel casero va a ser lavar bien la calabaza para remover cualquier resto de mugre. Entonces vamos a cortar la calabaza en trozos aproximadamente enormes, de un tamaño que nos deje colocarlos en una cazuela con agua después y cubrirlos totalmente con agua.
Los champiñones tienen una corteza durísima, con lo que para cortarlos precisarás un óptimo cuchillo, paciencia y precaución de no cortarte.
INGREDIENTES:
1 Calabaza cítrica
Azúcar
2 Ramas de canela
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Nosotros Vamos a cortar la calabaza con un cuchillo grande. Se debe tener bastante precaución por el hecho de que la corteza es durísima. Asimismo hay gente que lo tira al suelo para abrirlo y recibe múltiples golpes para romperlo.
Una vez cortado, vamos a hacer 4 trozos de cada mitad, según el tamaño.
Retire las semillas negras de manera cuidadosa. Asimismo se tienen la posibilidad de eliminar tras hervir la calabaza.
Pone los trozos de calabaza con la piel hacia arriba en una cazuela grande. Cubriremos la calabaza con agua y la herviremos a fuego retardado y tapada. Lo hemos hervido a lo largo de una hora pero es dependiente algo de la calabaza. Ha de ser suavísima y los filamentos comienzan a derrumbarse. Chorrear y dejar enfriar. Reservaremos una medida pequeña de agua de cocción, por si acaso mucho más adelante la requerimos.
Cosecharemos el resto de las semillas negras. Con el apoyo de una cuchara vamos a retirar toda la pulpa. La cáscara ha de estar limpia.
Pesaremos la pulpa, la nuestra pesa 1.300 kg. y le agregaremos el 75% de su peso, o sea, 1 kg. de azúcar. La sintaxis es ya de tu gusto. Si disfrutas muy dulce, puedes añadir exactamente la misma proporción de pulpa al azúcar, y si no disfrutas tan dulce, puedes emplear media proporción de azúcar y pulpa.
Vamos a poner la pulpa de la calabaza y el azúcar en una olla y le agregaremos jugo de limón a fin de que no se cristalice el azúcar. Quitaremos todo a fin de que todos y cada uno de los elementos queden integrados. Añada los palitos de canela y cocine el pelo de ángel a lo largo de unos 15 minutos a fuego retardado, mezclando esporádicamente. Pasado este tiempo, removemos todo el tiempo, para supervisar que no se quede seco. Lo hemos hervido unos diez minutos mucho más. No es requisito añadir agua hirviendo, pero si ves que es necesario a lo largo de la cocción, siempre y en todo momento puedes añadirla.
Vamos a retirar las ramas de canela y vamos a dejar enfriar. En el momento en que esté totalmente frío, se puede poner en frascos de vidrio bien cerrados y guardar en el refrigerador.
¿Cuál es el resultado del pelo de ángel?
El pelo de ángel es una pluralidad de calabaza, originaria de los Andes americanos, cuyo nombre científico es «Cucurbita ficifolia». En Venezuela es conocido como «pelo de ángel», en España como «Sidra», en Ecuador como «sambo», en Argentina y Chile como «alcayota», en Perú y Bolivia como «lacayote», en Salvador, México y Guatemala como «Chilacayote» y en Portugal como «Chila».
En ese instante, ¿qué? ¿De qué forma se ve? El pelo de ángel es un fruto esférico de color blanco. Por fuera, la cáscara es dura, lisa y pulimentada. Por la parte interior está repleto de pequeños hilos blancos, enmarañados con muchas semillas negras. Al cortarlo suelta un líquido astringente que puede ser un tanto desapacible.
Consejos para un pelo de ángel especial
Tenemos la posibilidad de preservarlo en tarros enlatando o aguardando a que se enfríe y congelarlo. Así te va a durar hasta un año en perfectas condiciones.
El tiempo de cocción de la calabaza puede cambiar según esté dura o ahora madura, con aproximadamente tiempo respectivamente.
Tenemos la posibilidad de aromatizar el pelo de ángel con ralladura de naranja, esencia de vainilla o canela, lo que prefiramos.
Contrariedad: simple
En relación se enfría, está ya listo para emplear. Para preservarlo puedes preservarlo en tarros, guardarlo en un envase en el frigorífico o aun congelarlo. Les animo a que aprovechéis la temporada de calabazas y hagáis pelo de ángel para todo el año realizando ricas conservas para nosotros y asimismo para obsequiar.
En el momento en que está recién llevada a cabo no puedo resistirme a comer un tanto de este modo, a medidas de cuchara, pero lo cierto es que es un relleno maravilloso para toda clase de dulces y me agrada singularmente en las empanadillas, en el hojaldre. , en ensaimadas o tartas. Por su gusto dulce y especial y esa textura que recuerda a los pelos dorados, es una genuina preparación… ¡escándalo!
